Día 10 (2):
Desde hace mucho tiempo, vamos desde que
dejé de comerme las tortillas de patatas de mi abuela, voy buscando como un
alquimista cualquiera, mi “quinto elemento”, mi piedra filosofal……….esa sartén
que da vida a todo lo que echas, devolviéndote los alimentos con sabores que
fluyen a ellos mismos.
Bueno, me he puesto un poco filosófico
barato, pero, en verdad, ¿no os acordáis cuando nos freían unas patatas en
sartén, o esos huevos fritos….y si hablamos de las tortillas….? ¿ A que ahora,
sabiendo bien las cosas…, no saben como antes?
No seré yo quien descubra ahora la
problemática del TEFLON.
En los medios de comunicación las cosas
que no interesan pasan desapercibidas, pero, hoy en día, gracias a internet la
información esta ahí, también la desinformación, pero para eso tenemos algo
debajo de la cabellera……
El caso es que nosotros si hemos decidido
desprendernos de todas las sartenes que contienen este material y, como de
momento no vamos a comprar sartenes de titanio ( al parecer buenas,
bonitas…pero no baratas), hemos decidido volver a nuestros orígenes, y después
de recopilar información nos hemos decidido por una sartén de hierro.
Nos dirigimos a El Corte Inglés, y cual
fue nuestra sorpresa cuando no tenían ningún modelo de este material ( he de
confesar que la chica que nos atendió conocía perfectamente la problemática del
TEFLON, pero con cara de ¿Qué quieres que te diga, a mi me pagan por venderte
esto?) y decidí siguiendo la recomendación de algunos blogs y foros de cocina
comprar en la tienda on line CLAUDIA & JULIA
Hemos comprado la sartén y un mango/funda
para ella y la relación calidad/precio es excelente.
Hemos comprado una sartén de 28 cm y
hemos pagado 38,15 sin gastos de envío (al parecer nunca cobran los gastos).
En breve compraremos una más pequeña.
Ayer después de haber probado la sartén
para sellar carne y pescado, nos hicimos unas patatas fritas con su huevo frito
correspondiente, y…si, creo que he encontrado el quinto elemento……y además
SANO.
Aquí tenéis la prueba.
Si, la sartén de hierro es más delicada,
hay que cuidarla más, limpiarla enseguida, añadirle un poco de aceite para
guardarla…..exactamente igual que hacían nuestras madres y abuelas…¿y qué? ¿No
merece la pena un poco de cuidado en los utensilios de cocina, a cambio de
recuperar sabores y sobre todo salubridad?
Nosotros lo tenemos claro.
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