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DíA 7 (4):
Elaborando la última receta de los
champiñones, estrenamos el aparato de cortar.
Una gran decepción ( y adelanto que no va
a ser la única..)
Por lo que hemos observado, para cortar
en rodajas , todavía, pero para cortar en lo vulgarmente llamado “picadillo”, en
alimentos ricos en agua como la cebolla, se pierde mucha sustancia, llegando
casi a “desaparecer” como ha sido el caso de la cebolla.
No teníamos la previsión de esta
incidencia y hemos salvado la receta gracias a
un bote que nunca está de más para una
emergencia como ha sido el caso.
De todas maneras, vamos a dejar la
cortadora eléctrica en cuarentena para seguir probándola.
Para colmo, quisimos hacer patria y dentro de la variedad de uva que ahora tenemos de moda en casa, (Riesling), compramos un producto nacional. pero, aunque tiene un buen paladar, y se deja beber, nos ha resultado muy seco, y nuestro gusto para los blancos se dirige más a los vinos con un punto floral y algo dulces, semi-dulce es el punto ideal (no confundir, para nada con el semi-dulce de los cavas, para nada)
Hay!!! Si hubiéramos hablado antes del aparatito. .. d todas formas puedes sacarle partido, yo la utilizo mucho para cortar en rodajas y hacer mucho más rápido las tortillas de patatas y cremas, Y hacer una ensalada japonesa de zanahoria que desde aquí te invito que probéis y cuentes.
ResponderEliminarUnos buenos cuchillos y en su caso una buena mandolina.
ResponderEliminarHace muchos....muchos años (demasiados jaja) recuerdo que mi padre compró un corta-fiambres, los primeros días comíamos fiambre recién cortado.....al final se tiró más de veinte años en los armarios de arriba de la cocina, quizás incluso siga estando. ¡Mira¡ Me has dado una idea para un nuevo artículo......